viernes, 31 de octubre de 2008

Invierno (soneto roto)


Tienen los días de invierno un sol leve
que bosteza aterido, desmayado
de luces, cual simulacro olvidado
que anuncia en sus sombras blancas la nieve.

Perdieron ya las horas su relieve
y anda el viento con la mar enojado.
El camino en la niebla está varado
y no tengo árbol verde que me lleve.

Adagio del tiempo, sueño en el alma,
tardes pequeñas con faroles de agua.
¡Qué fríos tiene los ojos la luna!

Se instala la noche en su mutismo
ahogando la acuarela gris del día;
tras el soplo helado de una estrella llora un niño.

martes, 28 de octubre de 2008

Sumiso amor


Una desproporcionada tentación
de ver sólo un trozo apetitoso de carne
rotunda y cocinada para la lívido,
con dos ojos que te tienen que mirar desde muy lejos,
tan lejos que puede que confundamos la distancia
y terminemos por encontrar nuestros propios ojos
mirándonos a nosotros mismos.
Entonces todo parecería que fuese cuestión de cerrarlos
y que las manos hablen y vean,
porque quizás en ese espejo no nos queramos ver jamás,
así de sumisa ella,
así de sumisos todos,
tan carne en la carne, tan inermes,
sintiendo tanta hambre de deseo
que hasta la misma hambre se harta.
Reto para el amor,
para sentarlo en el plato del ayuno y comer cómo y lo que sea...
Que las manos hablen, si se atreven,
que yo ya entorno la mirada y me callo.

miércoles, 8 de octubre de 2008

Desde lo pequeño


A veces me detengo ante las cosas
a escuchar el tenue aletear de un ángel
modelando en ellas con infinita ternura,
sombras de la memoria ida y recuperada
que surgen ante mí
desde cualquier pliegue de luz
conque la vida acentúa su naturaleza callada.
Es entonces que renazco yo
y renacen ellas,
y de no ser más que un chato relieve
sin formas escrituradas
desde que en el origen de todo
se sembró mi escasa semilla,
vuelvo a soñar que soy senda, poeta,
laberinto de sueños, paisaje del alma.
Y vestido del verso que habita en la belleza
recompongo el gesto amargo
y salgo a la vida, renovado,
como si fuera todo verdad,
como sin creer en Dios, creyera.

miércoles, 1 de octubre de 2008

Ana Fagarazzi


Descubrir a la mujer interior, a la musa de todos los hombres, a la polimórfica figura de la Diosa, todo eso y más está en la mirada de ANA FAGARAZZI en sus "fine art pictures".
Y es que para el hombre, la imagen de su Compañera de la Vida puede ser un interminable caleidoscopio en cuyas caras, a veces, la sombra sepia de algún recuerdo asoma por las páginas polvorientas de la memoria.