miércoles, 21 de julio de 2010

Nastassia


La glotonería del obseso de sexo siempre acaba por ocasionarle serios problemas. Porque parece mentira que después de tantos siglos de civilizado romance y tanto escarceo amoroso publicitado por la especie, no hayamos entendido todavía que comido el pastel, desaparece el hambre.
Si hay que comer, se ha de hacer muy poco a poco, porque el trozo de belleza que a los humanos se nos fue concedido es parco, diseñado con avaricia y lleno de humo; y el humo termina por no ser nada más que eso, humo.
Heme aquí obnubilado por "otra nubecilla" de mi pasado, otro arabesco del humo de mi cigarrillo que intento que chupada tras chupada no se me acabe nunca, o al menos que no se me acabe tan pronto.
Esta otra fantasía además es falsa por dos motivos, por ser imposible que jamás se me queme con mi cigarro y porque ya no es lo que era; pero cuando era digna de ser fumada y bien fumada, a mí al menos me aficionó a leerme en sus ojos y a no jugarme lo poco que los dioses me dieron debajo de las sábanas de mi cama.
Porque sabía que en mis manos el pastel no me iba a durar ni un suspiro....Un suspiro de 10 segundos.

Tal vez por eso y por ella, dejé de fumar a solas en la cama. Prefiero que las cenizas blanquecinas de mi tabaco quemen el deseo de otras manos, de otras bocas, de otros labios...Todo con tal de que el pastel siga impoluto, entero, semoviente y tan apetecible como el primer día. En el momento en que me decida a hincarle el diente, se me acaba el pastel, el hambre y la vida misma.
Pues ya estoy en ello; es por eso que envejezco, gordo y harto como un glotón; por comer tanto y tan rápido del pastel de los dioses.

Lo que ignoro


Y finalmente la vida quizá consista en soledumbres
impuestas por la ignorancia del cuándo y del por qué,
y para el tiempo en que devenimos en sabiduría
llegando a las respuestas,
nos llaman desde no sabemos dónde
y desaparecemos.

Mientras tanto,
nos violentamos en el morir y en el amar,
que es el vivir,
al tiempo que nos deshacemos poco a poco
en luminosos chispazos envueltos
de una silenciosa belleza,
que sospechamos sólo late
en los sueños del que nos sueña.

sábado, 10 de julio de 2010

The gentle paths of my best moments


...and when the fresh breeze
from the evening falls,
to take silently a walk with you,
hand in hand,
breathing the last lights of the day,
tasting the first smells of the night.

Eternidades


Los pensamientos apenas lamen
el cristal oscuro de la tarde,
mientras las horas deambulan
por los infinitos caminos del reloj.